La escritura nos alerta en cuanto a la inclinación del corazón del hombre por el dinero. En Colosenses 3:5 vemos que la avaricia es idolatría de lo cual ya Jesús había hablado en Lucas 16:13 equiparándola a adoración. En 1 Timoteo 6:10 la escritura nos revela el amor al dinero como “la raíz de todos los males” el cual es expresado por el hombre en el materialismo, la avaricia, la codicia, la falsa seguridad de las riquezas materiales. Entonces podemos entender el materialismo del mundo actual como una adoración. El hombre le rinde culto a las riquezas, pero ese culto es la raíz de todos los males que aquejan al mundo. Por supuesto que el que está detrás de toda esta adoración es Satanás.

Satanás ha sido el mas grande vendedor de todos los tiempos; le vendió la idea de ser como Dios a Eva y ésta, engañada se la compró trayendo el más grande quebranto a la humanidad. Contrató con engaño a la tercera parte de los ángeles de Dios y quiso venderle al mismo dueño del universo los reinos del mundo mostrándole su grandeza y esplendor. La figura del rey de Tiro nos da una descripción exacta de Satanás como ese grande comerciante que él es en los capítulos 27 y 28 de Ezequiel.

Al estudiar la vida de Salomón nos damos cuenta de que su apostasía comenzó cuando su corazón se volvió codicioso. Las mujeres fueron solo la consecuencia, la raíz en realidad fue su inclinación al dinero. Incluso la Iglesia de Laodicea es reprendida por el Señor porque se jactaba de su riqueza material, una iglesia que por cierto bien puede representar a la iglesia de hoy día.

Basta ver un poco el sistema de mercado actual. En realidad, no se busca satisfacer necesidades sino más bien crearlas para que la gente sea dependiente. Todo lo que hoy se comercializa crea dependencia a la persona, crea mas necesidades de tal manera que le gente esté esclavizada toda su vida al sistema económico. Todo esto lo logra a través de vender una ilusión, comodidad, esperanza, imagen, todo ello basado en el engaño y la falsedad. Así es nuestro mundo actual, todos los medios de comunicación venden mediante el engaño, ya no solo productos de consumo, sino, ideas, ideologías que tuercen los establecido por Dios en su ley divina y eterna. Por esto debemos de entender que hay quien está detrás de todo este sistema: Satanás.
Aunque conoce su futuro no ha parado, sigue avanzando en su plan de esclavizar a la humanidad. Todos los cambios que se avecinan en cuanto a la modernidad en los sistemas monetarios, el uso de tecnologías nuevas como los celulares con el uso de las huellas o scanner de iris o sistemas biométricos apuntan a lo que desde hace mucho tiempo se ha hablado:

Una marca permanente en cada persona con un número de identidad único para todo tipo de transacciones financieras e identificación de uso estandarizado mundial.

Jesús reprendió a los fariseos cuando éstos le pedían les diera una señal celestial (una prueba) de que él era el mesías. En otras palabras, querían saber si era el tiempo del cumplimiento profético de su venida.: “¡Hipócritas! que sabéis distinguir el aspecto del cielo, ¡mas las señales de los tiempos no podéis!” Mateo 16:3

El pueblo de Dios no escapará de todo esto con fuerza propia. Viene una intervención sobrenatural en favor de su pueblo, pero es necesario que estemos apercibidos de los tiempos que nos ha tocado vivir.
Romanos 16:20 Y el Dios de paz aplastará en breve a Satanás bajo vuestros pies.

Dios nos guarde de la hora de prueba que ha de venir sobre el mundo entero.

Saludos y que Dios te bendiga.

Enrique Moore